DreamWorks sigue aprovechando el filón de sus franquicias más exitosas en un intento por mantener los buenos resultados de taquilla. Si el año pasado fue el turno del spin-off de Shrek con El gato con botas, ahora se estrena la tercera entrega de Madagascar: Magascar 3: De marcha por Europa. Con una narrativa que parecía agotada, el trío de directores Eric Darnell, Tom Mcgrath y Conrad Vernon, nos ofrecen la más divertida de las tres entregas. Con una animación impecable, un estallido de color e inteligente dosificación de la acción, es la película más dinámica y atractiva de la saga. Amena, insustancial y un tanto naif. Fila Siete. (2,5/5)
Tras fugarse del zoo de Nueva York y reencontrar sus raíces en la sabana africana, el león Álex, la cebra macho Marty, la jirafa macho Melman y la hipopótama Gloria continúan sus aventuras en Europa, donde deberán enrolarse en un circo itinerante para huir de una incansable funcionaria francesa de control de animales. Los directores mantienen un nivel altísimo de animación en 3D estereoscópico y potencian todavía más un frenético ritmo narrativo, característico del cartoon americano más alocado y delirante, en que se inspiran. Esto supone sacrificar la hondura dramática de los personajes. J. J. M. (Pantalla Grande). (6,5/10)
Por el momento, Madagascar 3: De marcha por Europa es claramente la película con más ritmo y acción de la saga. No hay tregua para el espectador, y hay que reconocer que algunas secuencias son extraordinarias. Toda la persecución que tiene lugar en Montecarlo, por ejemplo, es de una calidad enorme, con una colección de divertidos gags que surgen a cada minuto y la presentación del inolvidable personaje de Dubois, una supermala fenomenal. Como es habitual, el guión ofrece rápidos diálogos, alguna referencia a la actualidad y un puñado de buenos sentimientos. DeCine21. (6/10)
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