CARLOS CRISTOS

LAS ALAS DE LA VIDA

Ha muerto Carlos Cristos, médico de 51 años, gallego y residente en Mallorca, tras padecer una enfermedad neurodegenerativa.

No sé por dónde empezar, pues no pretendo otra cosa que rendir un homenaje a este hombre excepcional, al que no conocía hasta que pude disfrutar de la visión del documental Las Alas de la vida, dirigido por A. P. Canet.

Su preocupación por llevar hasta las últimas consecuencias el afán de servicio y entrega, que fue preocupación constante en su vida, le movió a plantear a su amigo, A. P. Canet, la posibilidad de rodar un documental sobre su vida cotidiana con esta dura enfermedad. Su idea no era otra que, dada su condición de médico y paciente, dejar un testimonio que pudiera servir de ayuda a quienes se encontraran en situaciones parecidas.

Así se hizo, y durante 3 años (2.003 a 2006) las cámaras acompañaron a Carlos con maestría, sensibilidad, naturalidad y discreción. No limitándose a filmar el avance de la enfermedad y su progresivo deterioro, sino que lo muestran en las diversas facetas de su vida, en familia, con los amigos, ante el médico, con sus dudas, anhelos y esperanzas. Sin dramatismos, asumiendo sus circunstancias con naturalidad y aprovechando hasta el máximo el regalo de la vida, el hecho de despertarse cada mañana.

Es ejemplar ver con qué naturalidad una persona inquieta y vitalista (cooperante en Ruanda, Médicos sin Fronteras, ala delta, programa en radio en RNE, ..), va desprendiéndose de tantas cosas, aceptando las limitaciones que progresivamente, sin pausa y sin retorno, le va produciendo su enfermedad. Hay un momento en el que dice, "no importa que la leña se queme, siempre que dé calor".

El documental , Las Alas de la vida, se estrenó antes de su muerte y obtuvo, entre otros, el primer premio en la Seminci de Valladolid (Sitio oficial: http://www.lasalasdelavida.com/index.html). En esta Web podéis encontrar bastante información adicional.

Estamos ante un canto a la vida, al amor y a la trascendencia. Se trata de un impresionante testimonio de amor, lección de cómo sobrellevar la enfermedad y afrontar la muerte con dignidad, y "si se puede, con una sonrisa". Pero no por ello dejan de plantearse, con absoluto realismo y honestidad intelectual, cuestiones de enorme trascendencia, tales como: dependencia, cuidados paliativos, la importancia del entorno para el paciente, idoneidad de los tratamientos y medicina regenerativa, eutanasia, muerte, más allá, ...

¡Bueno!, Carlos, tú repetías constantemente que no tenías Fe, pero sí esperanza. Ahora, leyendo la Encíclica de Benedicto XVI sobre la Esperanza, recientemente publicada, nada más comenzar, me encuentro con esta frase, "Gracias a la esperanza podemos afrontar nuestro presente" y me doy cuenta que fuiste la encarnación de esa afirmación.

Muchas gracias, amigo Carlos, por tu ejemplo y testimonio de vida. Ya tienes tu recompensa y disfrutas de ese abrazo de Padre que tanto deseabas. Hasta que nos veamos en el cielo.

Selección de escenas gentileza de www.decine21.com